Hay cosas que simplemente son.... inevitables.
Es inevitable mirar el móvil esperando ver una llamada que nunca llega.
Es inevitable escribir decenas de mensajes que termino por borrar.
Es inevitable que sea el primer y último pensamiento del día.
Es inevitable ausentarme mirando al infinito.
Es inevitable sentirme el más tonto del mundo.
Es inevitable cerrar los ojos y ver su imagen.
Es inevitable vivir de sueños.
Es inevitable intentar evitar lo inevitable.
Cuando escucho la canción de esta entrada me es inevitable pensar en las largas noches del pasado mes de Julio. ¿Cómo puede transmitir tantas cosas una canción?
Chopin - Nocturne c minor op. 48 No. 1
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Supongo que estaras mal pero aun asi te envidio. Nunca he sentido algo así por nadie ni creo que nadie lo haya sentido por mi.
ResponderEliminarEs la entrada que mas me gusto, ¿te importa que copie la poesia para mi blog de poesias?
Hola Paola, me tienes envidia? No sabes lo que dices.
ResponderEliminarNo es una poesía, es simplemente.... bueno copia lo que quieras